Cortinas de Humo

 

Es imposible negar la experticia que tiene el régimen, cuando se trata de desviar la atención de los temas prioritarios. Con los años, aprendió a manejar muy bien los tiempos de los escenarios políticos y, más aún, supo aprovecharse de los errores de la oposición y de las debilidades ciudadanas de la gente. Ciertamente, ese único aspecto en lo que es eficiente el chavismo no podía ser eterno. Con el paso del tiempo, la seguridad de saberse con el control de todo el poder del Estado lo hace descuidado y vulnerable. La coalición de poder en si misma es un punto frágil, visto que cada fracción busca afianzar sus intereses y defenestrar a la otra. 

La dinámica de la maquina destructora chavista, esta sin control alguno y ha comenzado a triturar a cualquier camarada que se interponga entre Miraflores y el dinero malversado. Por supuesto, antes de iniciar la razzia interna debían montar sobre la opinión pública su conocida estrategia mediática, con el propósito de tapar la decisión de apresar a los testaferros y que la gente conozca la inmesa cantidad de dinero robada. Claro está, el mejor tema para apartar la atención del venezolano no era otro que Juan Guaidó. Con el tema Guaidó, Maduro y su séquito buscan matar dos pájaros de un tiro, es decir, quitar al mejor candidato a las primarias y desprestigiar a la verdadera oposición. 

Maduro como “jefe” de una de las fracciones, necesita crear un escenario distinto al que ocurre en realidad. Sin embargo, dentro del terror cerval que le produce la investigación de la Haya, deja colar algunas pistas de cómo está la situación en el PSUV. El día de ayer de manera frenética y casi desesperada, ordena al SEBIN apresar a quien lo traicione. En primera instancia, habla de los corruptos de su “gobierno”, pero los dardos se dirigen a quienes tienen en mente otro tipo de traición. Sin ir muy lejos, la salida del país de Guaidó por tierra, es la evidencia de que las traiciones están a la orden del día. Maduro conoce lo que se avecina y el grito a la oscuridad que da, es para todo aquel que piense en algún momento ser testigo de la CPI.  

Cortinas de humo se preparan en los laboratorios. El primer paso, fue pagar el viaje a España de tres de sus alacranes más emblemáticos, Timoteo Zambrano, Antonio Ecarri y Luis Augusto Romero. Estos monigotes hacen una gira comunicacional por medios españoles que, adrede o por desconocimiento de la situación venezolana, catalogan a estos alacranes de “nueva plataforma opositora”. Aferrados al “exilio” de Guaidó, el plan es afianzar la oposición que Miraflores desea porque, en definitiva, las elecciones libres se darán; guste o no al régimen. La estratagema montada con estos personajes ya no funciona, demasiado desprestigio junto. 

Toda medida distractoria que inventan en la actualidad tiene un solo propósito. En su afán de hacerle creer a los militares que la investigación de la CPI no procederá, busca dilatar el proceso y solicita a la Sala de Cuestiones Preliminares I de la CPI autorización para presentar una réplica al informe de la Sección para la Participación de las Víctimas y las Reparaciones. Petición que le fue denegada en menos de 24H de forma contundente. El régimen inicia el conteo y mira desde el balcón del pueblo, un panorama poco alentador. No importa cuantas detenciones de testaferros hagan, las cartas están destapadas sobre la mesa y toda lectura ofrece el mismo final. Las cortinas de humo, como la explosión de una supuesta bombona de gas, no tienen el punch de antes. Las cortinas de humo -pequeñas o grandes- se disipan y dejan ver lo que sucederá. 

Miguele Peña
@miguepeg